El Consejo de Derechos Humanos de las Naciones Unidas concluyó en Ginebra (Suiza) el pasado 11 de octubre su 57ª sesión ordinaria. Durante esta sesión, se adoptaron 37 resoluciones.
En nombre de Paraguay, en la reunión de la misión permanente de Ginebra en el marco de la sesión de la ONU, intervino el viceministro Víctor Verdún del Ministerio de Relaciones Exteriores.
Verdún, mantuvo una reunión con la alta comisionada adjunta de las Naciones Unidas para los DDHH, Nada Al-Nashif, en la sede del Palais Wilson. También se reunió con la paraguaya Graciela Noguera, como representante de la Asociación NAF-PY (Niñez Adolescencia Familia), para abordar temas relacionados con la defensa de los valores de vida y familia. Noguera es abogada y cristiana evangélica.
El representante de Paraguay destacó su compromiso con la protección y promoción de los derechos humanos, subrayando la importancia de fortalecer las instituciones nacionales, como la Oficina del Defensor del Pueblo, y la necesidad de crear una institución nacional de derechos humanos para garantizar el cumplimiento de sus obligaciones internacionales.
Paraguay puso un énfasis particular en varios temas clave como los derechos de los pueblos indígenas, la igualdad y derechos de las mujeres y mejorar las condiciones de vida y pobreza de su población, mejora del acceso a servicios básicos como la salud y la educación.
Sin embargo, en su intervención en el Consejo de Derechos Humanos, Verdún manifestó que el Paraguay “ante cualquier definición sobre temas controversiales en planes de educación en Derechos Humanos, debe realizarse en total conformidad con su marco constitucional y legal interno; así como con las prioridades de desarrollo del país”
Esto supone una declaración de la soberanía del Paraguay ante la controvertida ESI (Educación Sexual Integral), con el lenguaje acordado por la Asamblea General de la ONU en cuanto a Salud Sexual y Reproductiva, de forma que en Paraguay se respeten las obligaciones de los Estados en consonancia con el art. 5 de la Convención sobre los derechos del Niño.
Paraguay defiende que la Educación en Salud Sexual y Reproductiva sea científica, respetando la edad, la cultura y la participación de los padres como responsables de sus hijos. La actual propuesta de la ONU de un supuesto «Enfoque de Derechos» en vez de proteger la salud física y mental de los niños (promoviendo el retraso en el inicio de las relaciones sexuales p. ej.) normaliza y fomenta comportamientos de alto riesgo que pueden tener consecuencias irreversibles.
La Guía sobre Educación Sexual de la ONU jamás fue acordada por los países miembros, y obedece a una Guía Técnica Internacional (no acordada) sobre Educación Sexual, que promueve abiertamente la hipersexualización de niños y jóvenes, exponiéndolos innecesariamente a instrucciones sobre placer sexual, masturbación, promiscuidad y diversidad sexual de género.
El pasado mes de junio Paraguay denunció injerencias de la ONU queriendo imponer una legislación permisiva del aborto, la reducción de la edad legal de relaciones sexuales y otros aspectos de la ideología de género.
El pasado mes de julio Paraguay defendió una educación sexual y afectiva y con su voto ayudó a bloquear en la ONU el consenso sobre una ESI con ideología de género. Diecinueve países votaron a favor de la enmienda, logrando algo histórico al lograr una mayoría de votos en contra.
Publicado en: EVANGÉLICO DIGITAL – LATINOAMÉRICA
– Ginebra | Paraguay se reafirma ante la ONU en Educación Sexual y DDHH, y en su derecho a legislar